jueves, 27 de noviembre de 2025 11:59
Catamarca atraviesa un periodo de sequía sin precedentes que ha llevado al Dique Las Pirquitas a operar en su cota más baja de los últimos años. Esta emergencia hídrica no solo reduce la reserva vital, sino que también afecta la calidad del agua, poniendo a prueba el sistema de abastecimiento de la Capital y zonas aledañas. Los niveles de agua se encuentran muy por debajo de sus promedios históricos, confirmando la magnitud de la crisis.
La comparación con datos oficiales: La capacidad histórica
La situación actual adquiere una dimensión alarmante al contrastarla con los parámetros técnicos de la obra.
Según informes técnicos históricos sobre el embalse, como los compilados en documentos oficiales del Consejo Federal de Inversiones (CFI), la capacidad original del Dique Las Pirquitas al momento de su inauguración, en el año 1961, era de 80 Hectómetros cúbicos. Sin embargo, debido a la acumulación de sedimentos (embancamiento) a lo largo de las décadas, la capacidad normal de almacenamiento se ha reducido a los 45 hectómetros cúbicos.
El actual descenso del agua, debido a la falta de precipitaciones, posiciona al dique por debajo del llamado «nivel crítico» o nivel operativo mínimo, distanciándose enormemente de esos valores técnicos de referencia y equiparando la severidad de esta sequía con los episodios más duros registrados en el pasado provincial.
En este sentido, egún detalló a nuestro medio el gerente de Redes de Aguas de Catamarca, Gustavo Jordán, la pronunciada bajante del embalse expuso el fondo del dique a la luz solar, lo que favoreció la aparición de algas que generan olor y sabor en el agua. Este fenómeno, aclaró, suele darse cada año entre septiembre y octubre, pero en esta temporada la sequía lo intensificó de manera excepcional.
Máxima preocupación
Esta situación es de máxima preocupación, ya que el embalse es vital para el abastecimiento de una amplia zona. De allí se suministra el agua al acueducto que provee a:
- Fray Mamerto Esquiú
- Valle Viejo
- Las Colonias
- Parte de la Capital
La dramática baja del nivel del agua pone en serio riesgo tanto el suministro para riego en las actividades productivas de la zona como el consumo de miles de habitantes.
Algas y solución con carbón activado
La severidad de la baja del agua ha provocado la proliferación de algas en el embalse. Esto ha generado malos olores y sabores en el agua de red, un efecto directo de la sequía que afecta la percepción de la calidad del recurso en los hogares.
Ante este desafío, la empresa Aguas de Catamarca ha activado un protocolo de tratamiento especial. La medida incluye la utilización de carbón activado en la planta potabilizadora. Las autoridades garantizan que, con este tratamiento adicional, el agua que se distribuye a la población sigue siendo apta para consumo humano, aunque los cambios organolépticos sean perceptibles.
Concientización: El último recurso
Frente al riesgo de desabastecimiento provocado por la situación crítica del Dique Las Pirquitas, las autoridades de gobierno y Aguas de Catamarca continúan intensificando el llamado a la concientización de la ciudadanía. La campaña se centra en la necesidad de un uso responsable y el ahorro estricto del recurso hídrico, con el objetivo de mitigar los efectos de esta sequía histórica en la reserva vital de la provincia.
