El martes por la noche, en la Capital, un operativo antidrogas dejó un saldo de dos mujeres detenidas. El caso tiene una particularidad, las dos sospechosas son oriundas de Bolivia y transportaban en sus estómagos varias cápsulas con cocaína. Las mujeres fueron enviadas al Hospital San Juan Bautista, donde comenzaron con el proceso de evacuación.
De acuerdo con información a la que pudo acceder El Ancasti, ayer las mujeres continuaban con el proceso de expulsión de las cápsulas. Si bien no se precisó la cantidad de cápsulas, se indicó que se trataría de kilo de cocaína. Hasta el cierre de esta edición, las mujeres seguían con este proceso, hospitalizadas.
Según se detalló, las mujeres venían desde el norte del país, en un micro de larga distancia. El procedimiento fue realizado por Gendarmería Nacional Argentina bajo las directivas del Juzgado Federal de Catamarca, a cargo del juez Federal Miguel Ángel Contreras.
Modus operandi
Las llamadas «mulas» son el eslabón más pequeño de la cadena de narcotráfico. En el ambiente narco, son apenas un envase que transporta mercadería tan valiosa como letal. Las edades de las mulas varían: van desde los 18 a los 65 años pero el promedio es de 23. Una investigación realizada por la ONG Intercambios AC trazó el perfil de las personas detenidas por tráfico de drogas en Argentina: en su mayoría mujeres, jefas de hogar, de áreas humildes y en general, extranjeras.
También se advirtió que estas mujeres, atravesadas por distintas situaciones de vulnerabilidad, desde las organizaciones clandestinas son tentadas para acciones penalizadas de alta exposición. Estas mujeres suelen ser de bajos recursos, con una carga familiar importante, que las convierte en destinatarias ideales para escuchar y aceptar la oferta».
En el estómago, en la vagina o en el ano, de manera sólida o líquida, las «mulas» ocultan dentro de sus cuerpos pequeñas -y a veces no tan pequeñas- cantidades de estupefacientes. La expulsión de las cápsulas suele tardar un promedio de 40 horas. «Depende del paciente, de la cantidad, de su intestino, del género. Nosotros ayudamos con un preparado», explicó en su momento para La Nación Graciela Sorrentino, médica del Hospital Interzonal de Ezeiza Alberto Eurnekian, en Buenos Aires, un centro de salud con un área especializada en este tipo de pacientes.