Carmen Sigüenza
Madrid, 16 ene(EFE).- El narrador y poeta Ernesto Pérez Zúñiga, una de las voces más consagradas de la literatura en castellano, da un paso más y propone, frente a «un mundo mercantilizado, tecnocrático y alejado de la belleza», una búsqueda por lo mejor del ser humano, en su última novela ‘Veníamos de la noche’.
Un título que ya presagia el intenso camino que recorre su protagonista, Lucía, de 49 años, para atisbar la luz o el cielo azul que persigue pintar en Roma, donde está becada por la Academia de España, y donde se refugia huyendo de una asfixia profesional y familiar con un marido acosador.
Pero este esta idea es solo una excusa para tirar del hilo, porque Pérez Zúñiga (Madrid, 1971), granadino de crianza y subdirector de Cultura del Instituto Cervantes, establece en ‘Veníamos de la noche’, publicada por Galaxia Gutenberg, una batalla interior y exterior con todos los personajes sobre la vocación y la vida, la ciencia y el alma humana, el amor y el deseo o la entrega y la posesión.
El autor de novelas como «La fuga del maestro Tartini» (2013), con la que ganó el premio Torrente Ballester en 2014; «No cantaremos en tierra de extraños (2016), o «Escarcha (2018), donde narraba los abusos sexuales en la iglesia, entre otros, presenta también como protagonista a la Academia de España en Roma.
Una institución que quiere reivindicar, según ha explicado a Efe el autor, por los muchos escritores y artistas que han pasado por allí durante casi un siglo, entre ellos Valle Inclán, a quien también se rinde homenaje en el libro, y de quien Zúñiga es experto.
Para Zúñiga, esta novela, envuelta en sensualidad, es «una celebración del arte y la literatura como una de las mejores herramientas para evolucionar y combatir los males de nuestro tiempo».
«Esta novela es la apuesta definitiva por una vocación y una visión del mundo -argumenta-. La vocación es la escritura como descubrimiento y auto descubrimiento del mundo, la novela como alquimia de todos los lenguajes de la realidad.Siento que tengo un deber con este trabajo, un deber sin concesiones ni claudicaciones, como acaba sabiendo la protagonista».
«Es el libro que más me ha costado escribir: para mí ha sido una catalización del presente, a partir de la pandemia hasta hoy. Es una historia de amor y de combate con uno mismo y con otros, pero también una llamada de alerta a una sociedad cada vez más cómoda y enajenada en su dependencia tecnológica, en el cultivo del ego caprichoso, en sus sueños tecnocráticos de futuro», ha precisado el escritor.
«Mi personaje favorito de esta novela es Enrico: alguien que ama la belleza al filo de la muerte. Así creo que debemos vivir cada día», concluye el autor de poemarios como «Ella cena de día» (2000), «Siete caminos para Beatriz» o «Lance».
Dante, la Divina Comedia, William Blake, Bacon, Valle Inclán, Rothko, San Juan de la Cruz, recorren las páginas de esta novela plagada de poesía y de intriga por las calles de Roma, y cuyo título viene de unos versos del poeta y diplomáticos venezolano Vicente Gerbasi.
‘Veníamos de la noche’ se presenta hoy, jueves, en la Fundación Telefónica de la mano del escritor, premio Cervantes, Luis Mateo Díez, la filóloga Ángeles Encinar y el editor Joan Tarrida.-EFE
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