domingo, 21 diciembre, 2025

Tras los juramentos

Noticias Relacionadas

La inexistencia de una alternativa al liderazgo que Javier Milei se convirtió en el condicionante más poderoso de la actividad política tras las elecciones de medio término. El éxito del jefe libertario diezmó las formaciones que alguna vez fueron adecuadas para articular proyectos de poder de alcance nacional y desperdigó a sus integrantes en una miríada de agrupaciones territoriales huérfanas de representación.

Las fórmulas adoptadas por los legisladores para jurar al asumir sus cargos han provocado reacciones afligidas por la falta de respeto que suponen a Dios, la Patria, la institución parlamentaria u otros sacralizados conceptos.

Sin embargo, lo que por un lado puede ser interpretado como meras payasadas para obtener fugaces protagonismos, por otro podría ser síntoma del desconcierto general ante el fenómeno libertario. Ha de admitirse además que, en lo que a disparates y desatinos se refiere, las tropas del Presidente son difíciles de empardar y mal no les ha ido. Milei aportó ayer mismo al clima de cotolengo asistiendo a la entrega del Premio Nobel de la Paz a Corina Machado vestido con un overol de YPF.

Catamarca no podía mantenerse ajena a esta moda. El libertario Mateo Manti juró “por Javier Milei”. Pablo Castro Moreno, reelecto, de “La Cámpora”, lógicamente por “la libertad de Cristina”. Javier Galán invocó al “pueblo de Catamarca” y se hizo acompañar en la ceremonia por el “Topo”, conocido personaje de las calles capitalinas.

Ninguna de estas asunciones tuvo en la jornada el impacto de la del dirigente social Alejandro “Pitu” Salvatierra, que ingresó a la Legislatura bonaerense. “Por los porteños, en especial por los que viven en una villa; por Perón, por Eva, por Néstor, por Cristina candidata y libre, por la comunidad organizada que representa “Futurock” y, sobre todo, por la memoria de mi vieja que soñó que este día iba a llegar y al fin llegó», juró.

Las fórmulas adoptadas por varios legisladores para jurar revelan la crisis de representación y el colapso de las formaciones políticas. Las fórmulas adoptadas por varios legisladores para jurar revelan la crisis de representación y el colapso de las formaciones políticas.

Como era de esperarse, la fórmula precipitó críticas particularmente ácidas de parte de las siempre escrupulosas buenas conciencias, ya que “Pitu” es un ex convicto. No se advierte por qué habría que exigírsele a él, que aparte es bastante más meritorio que muchos de los que se llenan la boca de Dios y Patria, que se apegue a los rituales transgredidos por otros, pero contra las inquietudes hipócritas, cabe otro enfoque.

Si se excluyen las personalidades políticas, Salvatierra juró por sus vecinos, en especial los de las villas de donde proviene, la radio donde trabaja y su madre. Es decir: juró por sus vínculos más inmediatos y cercanos.

Si se adopta este punto de vista, se advertirá que expresó en clave personal una carencia generalizada: Perón, Evita y Néstor Kirchner están muertos; CFK, presa. Al “Pitu” no le queda más que encomendarse a su gente, su lugar de trabajo y su madre. Fuera de eso, la intemperie política. Nótese que ni siquiera juró por un concepto como podría haber sido “la radio”, sino por la “comunidad organizada de Futurock”. No por su familia, sino por su madre. Y resaltó su origen villero por sobre su porteñidad.

Fue extremadamente específico, como muy específicos fueron varios de los estrafalarios juramentos que se escucharon en la Cámara de Diputados de la Nación.

Acaso la especificidad obedezca a que Milei ha desarticulado las referencias colectivas más extendidas, fenómeno disgregador que se superpone al sistemático y abusivo manoseo de ideas integradoras como la de Patria.

Hay una vacancia de representación que los agentes políticos ajenos al universo libertario salvan con el repliegue tribal, en movimientos que estimulan la fragmentación sobre la que Milei reina.

Quizás sea demasiado extrapolar de unos simples y formales juramentos, pero a alguien estuvieron dirigidos: públicos muy chicos y por ahora demasiado distantes entre sí como para enfrentar el tsunami libertario.

Últimas Publicaciones