viernes, 17 octubre, 2025

RCP: guía esencial para prevenir y actuar ante un paro cardíaco

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Las afecciones cardiovasculares representan la principal causa de mortalidad en la Argentina, de acuerdo con las estadísticas oficiales. Luego del Día Mundial del RCP, que se recuerda cada 16 de octubre, especialistas buscan promover el conocimiento de las técnicas de reanimación cardiopulmonar y el manejo del Desfibrilador Externo Automático (DEA) para enfrentar emergencias.

La reanimación cardiopulmonar es un conjunto de acciones de urgencia que se aplican cuando una persona deja de respirar o su corazón cesa de latir. Consiste en una serie de compresiones sobre el tórax combinadas con respiración de rescate para mantener la oxigenación de la sangre hasta que se pueda recuperar la función cardíaca y respiratoria. Por otro lado, el DEA es un equipo portátil que examina el ritmo del corazón y, si es preciso, suministra una descarga eléctrica para intentar normalizarlo. Estos dispositivos han sido diseñados para que puedan ser operados por cualquier ciudadano, sin necesidad de contar con formación médica previa.

“Siete de cada diez casos de muerte súbita ocurren en ámbitos extrahospitalarios. Lamentablemente, es una situación más frecuente de lo que se cree y toda la población debería estar capacitada para asistir a una víctima, tanto con maniobras de RCP como utilizando el DEA”, subraya Marcelo Filiberti, Secretario de la Red Nacional de RCP y Prevención de Muerte Súbita de FAC.

Según los expertos, la aplicación conjunta de estos procedimientos puede ser decisiva, ya que la ejecución inmediata de RCP junto con una desfibrilación precoz puede incrementar las probabilidades de supervivencia hasta en un 70%. Especialmente si se realizan dentro de la ventana crítica de los primeros diez minutos desde que se produce el evento.

Fuentes especializadas en la materia sostienen que, si bien queda un extenso camino por recorrer en materia de concientización y entrenamiento de la comunidad para enfrentar estas circunstancias, tanto entes gubernamentales como empresas privadas están abordando la problemática. En el sector público, existen múltiples ejemplos de gobiernos provinciales que durante octubre están ofreciendo instrucción gratuita en RCP en plazas, establecimientos educativos y entidades deportivas, como el Ministerio de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires y las comunas de Junín y Trenque Lauquen, en el territorio bonaerense.

Javier Fernández Cronenbold, cofundador de Jotatec, una firma argentina dedicada al desarrollo y comercialización de instrumental médico, afirma: “En los últimos años hemos registrado un crecimiento significativo en las solicitudes de diversos organismos para entrenar a sus equipos con cursos de RCP y adquirir equipos DEA. Particularmente, como lo promueve la normativa vigente, en sitios de alta concentración de personas, como empresas, clubes, instituciones educativas, recintos deportivos y centros culturales”.

En lo que respecta a las medidas preventivas, una encuesta reciente realizada por la cobertura médica Avalian a 1500 personas en todo el territorio nacional refleja una mayor conciencia en la población sobre el cuidado cardiovascular. El 76% manifestó no ser fumador, una realidad muy distante a la de hace dos décadas. A este hábito saludable se suma la realización de actividad física -más del 58% practica al menos 30 minutos de ejercicio diario- y los controles médicos periódicos; el 57% confirmó que acude anualmente al médico para revisar su salud cardíaca y más del 68% se realiza electrocardiogramas con regularidad.

“Nadie desea tener que activar protocolos de esta naturaleza. Pero es una obligación tanto de las instituciones como de la sociedad estar preparados para intervenir si fuera necesario. Los recursos -es decir, el RCP y el DEA- están disponibles y al alcance de todos. Depende de nosotros dejar de postergar, capacitarnos y estar listos”, finaliza Fernández Cronenbold.

Protocolo de actuación ante una parada cardiorrespiratoria

Tanto los organismos internacionales (American Heart Association y European Resuscitation Council) como las entidades nacionales coinciden en una secuencia de pasos que pueden resultar cruciales para auxiliar a los pacientes en estas situaciones críticas y mejorar sus chances de recuperación.

1) Verificar el pulso y la respiración de la persona afectada. Si son anormales, activar inmediatamente el sistema de emergencias (107 o 911).

2) Iniciar las maniobras de RCP sobre el paciente en riesgo. Si hay más personas presentes, distribuir tareas: mientras uno ejecuta las técnicas de reanimación, otro busca el DEA.

3) Una vez obtenido el DEA, aplicar una desfibrilación rápida sobre el paciente. El dispositivo realizará un análisis automático y dará las instrucciones necesarias en caso de requerirse una descarga.

4) Repetir los dos pasos anteriores hasta la llegada del equipo de emergencias médicas o hasta que la persona muestre signos de recuperación.

5) Brindar atención posterior al incidente sobre el paciente.

6) Proceso de recuperación del paciente: incluye tratamiento adicional, observación, rehabilitación y acompañamiento psicológico.

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