viernes, 5 de septiembre de 2025 17:05
Un adolescente británico de 14 años murió en un trágico accidente vial cuando se dirigía a reencontrarse con su madre después de cinco años de separación. El hecho ocurrió en Lancashire, cuando su padre perdió el control de la camioneta en la que viajaban bajo los efectos de la cocaína.
La víctima, identificada como Ryan-Liam Morgan, era el mayor de los tres hijos de Kim Morgan. La mujer había conseguido, tras una larga batalla judicial, que un juez ordenara la revinculación inmediata con su hijo, interrumpida desde 2020 durante la pandemia, cuando el padre, Daniel Burba, impidió el contacto.
El 20 de abril, Burba manejaba rumbo a la casa de Kim para concretar el esperado reencuentro. Sin embargo, sufrió un ataque de epilepsia al volante y se desvaneció. Ryan intentó tomar el control del vehículo, pero no pudo evitar la colisión, que le provocó lesiones fatales.
Las pericias confirmaron que Burba, de 32 años, había consumido cocaína antes de conducir, no tenía licencia ni seguro. “Ryan debe haber estado muy asustado, tratando de salvar sus vidas. Su acto final todavía me persigue”, declaró su madre.
Desde la tragedia, Kim Morgan reclama Justicia y encabeza una campaña por la llamada “Ley de Ryan”, un proyecto que busca prohibir de manera permanente que quienes maten conduciendo bajo los efectos de drogas o alcohol no puedan volver a manejar. “Nada traerá de vuelta a mi hijo, pero espero salvar otras vidas en su memoria”, expresó.