Seguridad
Horas antes del acto de Javier Milei en Moreno, la provincia de Buenos Aires, a través de su gobernador y su ministro de Seguridad, manifestaron que no era capaz de garantizar la seguridad del presidente de la Nación dentro de esa jurisdicción. ¿Será capaz de garantizar la seguridad de sus habitantes?
Tomás Klepetar
No cambiaron
En las últimas elecciones el pueblo argentino votó por el cambio y ganó. Gracias a Dios el peronismo/kirchnerismo/camporismo se esfuerzan en demostrar día a día que en nada han cambiado.
Eduardo M. Ottolenghi
Confusión
Creo no equivocarme cuando digo que para la mayoría de los argentinos el proceso preelectoral que estamos viviendo es por demás confuso. La corrupción parece ser endémica. La intolerancia política está por todos lados. Los derechos sociales en su mayoría insatisfechos. Para los argentinos de bien, saber a quién votar en octubre nunca fue tan difícil. Como argentino residente en el exterior desde hace 32 años creo que es importante resaltar que un estado quebrado es incapaz de proveer a sus ciudadanos. Nuestro país lleva años sin tener crédito, está quebrado, y la primera prioridad de todo argentino de bien debiera ser el restablecer el crédito público, esto es, el “crédito de todos.” La corrupción atenta contra el crédito público al desviar fondos de todos para fines personales. Las promesas irrealizables también. Recuperar el crédito público implica atacar la corrupción en todas sus formas, y en particular, reconocer la restricción presupuestaria de la nación. Debemos aprender a distribuir los recursos que entre todos somos capaces de producir. Proponer gastos, por más justos que sean, va en contra del bien común si es que no se tiene en cuenta cómo solventarlos. Votar a quienes prometen sin explicar cómo pagar dichas promesas es también votar a corruptos.
Ricardo Adrogué
La carta inesperada
Mi foto con Macron y la historia de esa foto, publicada en La Nacion en junio de este año, hicieron que Norberto Frigerio me insistiera en mandarle el recorte al presidente francés. Si no hubiese insistido tanto , jamás lo hubiese hecho de motu proprio. Enviar una carta al Palacio del Elíseo a nombre de Emmanuel Macron y que ésta llegara a sus manos parecía algo utópico. Luego de muchas dudas, decidí hacerlo. Agregué en el sobre un librito en francés sobre una larga conversación mía con Borges. Luego me olvidé del asunto. Pero días atrás recibí un sobre de la Presidencia de la República Francesa, firmada por Rodrigue Furcy, Jefe de Gabinete del primer mandatario. Cuando el 15 de mayo de este año tuve en París ese increíble encuentro con Macron en la calle, a pasos de la Opéra, lo primero que le dije al saludarlo fue que yo había sido amiga de María Kodama y que ella me había contado de la visita suya con su mujer a su Fundación. La cara del Presidente se iluminó y me prestó mucha atención. María me había relatado después del llamativo interés demostrado por él ante la biblioteca de Borges. La carta me confirma la recepción del material, como consecuencia de un encuentro “del cual el presidente guarda los mejores recuerdos”. Señala además que Macron había tomado conocimiento de los textos enviados, sobre todo, del trabajo titulado Jorge Luis Borges. Entretien avec Alina Diaconu.
En este mundo incomunicado por tan sobreabundante “comunicación” informática , con tanto celular, diálogos virtuales, zoom, etc. recibir una carta papel constituye casi un milagro. ¿Qué presidente extranjero, de visita alguna vez por Buenos Aires, expresó, entre sus prioridades, conocer la biblioteca de Borges y la librería Grand Splendid? No sé de ninguno. En momentos en que pasan cosas tan terribles en nuestro país y en el mundo, cuando nos golpea cada día un vocabulario lleno de improperios, insultos y vulgaridad y los valores parecen estar en vía de extinción, esta historia es como un haz de luz en medio de las tinieblas. Por eso, a pesar de todo, albergo una esperanza .Está puesta en las personas educadas y respetuosas que aún quedan. Anhelo que sus hijos, sus nietos y bisnietos puedan construir mañana, contra viento y marea, otro tipo de sociedad: humanamente mejor.
Alina Diaconú
DNI 5.290.436
Por la vereda no
En Buenos Aires, como en otras grandes ciudades, y fundamentalmente por costumbres surgidas por la pandemia, la proliferación de ciclistas que trabajan para las aplicaciones de delivery han transformado el simple caminar por las veredas en una actividad de alto riesgo. Circulan a notable velocidad y ponen en peligro a los peatones, muy especialmente a los mayores, niños y también a sus mascotas. Los incidentes se multiplican día tras día pero nadie busca una solución. Existen normas que prohíben la circulación de bicicletas por las veredas, ¿pero acaso alguien sabe de alguna multa o condena que se haya concretado? La respuesta es no. Tal vez el cumplimiento de esa prohibición no atraiga votos. Propongo mientras tanto una medida simple y efectiva. En primer lugar que los agentes de tránsito registren estos episodios que hoy ignoran y que las sanciones recaigan en las 2 o 3 empresas de delivery, en gran parte culpables del vértigo demencial de muchos de sus “riders”, al incentivarlos con mayores ganancias mientras más rápido entreguen sus pedidos. Otra locura. No hace tanto concurrí a una reunión sobre seguridad convocada por el gobierno porteño. La respuesta que obtuve fue: “Es una cuestión cultural”, y que debía pasar por la legislatura. Mientras tanto, ningún proyecto piantavotos fue presentado, ni por el oficialismo ni por la oposición.
¿Quién detendrá el peligro de estos ciclistas?
Roberto Volpe
En la Red Facebook
El Partido Obrero parodió la foto de Milei en Villa Celina: “Fachos y represores nunca más”
“Socialismo igual miseria”- René César Barrientos
“Al menos hubiesen sacado el basural de tanta desidia que tienen atrás”- Walter Ezequiel Sáez
Son tan básicos que lo único que se les ocurre es lo mismo que hace el oficialismo, pero a la inversa. No se les cae una idea»- Sergio Londero