martes, 2 de septiembre de 2025 10:54
Un hombre identificado con las iniciales M.E.M fue imputado en la provincia de Neuquén por el asesinato de su bebé de tan solo 39 días de vida. La acusación, formulada por el fiscal del caso Andrés Azar y la asistente letrada Carolina Gutiérrez, sostiene que el padre le propinó una gran cantidad de golpes de puño a su hijo, provocándole la muerte.
Según la investigación preliminar del Ministerio Público Fiscal y la Policía provincial, el hecho ocurrió el pasado sábado en la vivienda que el acusado compartía con su pareja y sus otros hijos. Un informe de autopsia del Cuerpo Médico Forense del Poder Judicial confirmó que la muerte del bebé en el hospital de Centenario se debió a traumatismos severos en el cráneo y el abdomen, resultado de los golpes.
El fiscal Azar aseguró que las agresiones fueron lo suficientemente graves como para causar el deceso. Por esto, M.E.M fue imputado por el delito de homicidio agravado por el vínculo. La madre del bebé, por su parte, es sospechosa de tener algún grado de participación en el hecho, aunque aún no ha sido acusada de ningún delito.
Durante la audiencia, la defensa del acusado planteó que la muerte del bebé fue un accidente, mientras que M.E.M declaró: «Fue un accidente; jamás le pegué a mis hijos». Sin embargo, las lesiones de la víctima no son compatibles con una caída. El fiscal, además, indicó que hay indicios de que la mujer se encontraba en un contexto de violencia de parte del acusado, según los relatos de testigos.
El juez de garantías Marco Lupica Cristo avaló la formulación de cargos y, a pedido del fiscal, dispuso la prisión preventiva para el acusado por el riesgo de fuga y posible entorpecimiento de la investigación. La medida tendrá una duración de cuatro meses, el mismo plazo fijado para la investigación del caso.