Marcos Rojo acordó este jueves su salida de Boca. El experimentado defensor de 35 años aceptó la rescisión anticipada de su contrato y quedará en libertad de acción. La dirigencia del club, al no contar con él dentro del proyecto deportivo de Miguel Ángel Russo, le ofreció finalizar el vínculo antes de tiempo. Tras una primera negativa, el jugador reconsideró su decisión y firmará su desvinculación este viernes.
Según pudo saber TyC Sports, fue el propio Rojo quien impulsó la reunión clave. El miércoles por la noche le escribió a Marcelo Delgado, dirigente encargado de gestionar su situación, y le pidió que se contactara con su representante para coordinar un encuentro en el predio del club. «A ellos les habrá dolido, entiendo que piensen que los traicioné o lo que sea, pero es fútbol y ya va a pasar», dijo más tarde, en referencia a su relación con la hinchada de Estudiantes.
Desde su círculo íntimo lo convencieron de que aceptar la rescisión era lo más conveniente. Boca le garantizará el cobro hasta el último día trabajado. La decisión pone fin a una etapa marcada por altibajos y cortocircuitos con el cuerpo técnico.
El distanciamiento con Russo se evidenció en el último tiempo. El defensor fue marginado durante el Mundial de Clubes y recientemente vivió otro cruce con el DT, quien le prohibió participar de una charla postpartido tras la derrota con Huracán. Disconforme, Rojo abandonó el entrenamiento visiblemente molesto.
MARCOS ROJO RESCINDIÓ CONTRATO CON BOCA
Su salida también acelera las posibles partidas de Marcelo Saracchi y Cristian Lema, que tampoco son considerados por el entrenador. Ambos negocian rescindir sus contratos en las próximas horas.
Mientras tanto, Estudiantes de La Plata y Racing se posicionan como posibles destinos. “Saben que yo quiero a Estudiantes”, declaró Rojo, aunque en Avellaneda Gustavo Costas también lo tiene en carpeta para reforzar al equipo en la Copa Libertadores.