Aybar seguirá detenido debido a los informes de los técnicos forenses

El segundo pedido de salidas transitorias realizado por el ex intendente de Puerta de Corral Quemado Enrique del Carmen Aybar (64) fue rechazado por la justicia, tras evaluar los informes realizados por psicólogos del Cuerpo Interdisciplinario Forense (CIF). La jueza de Ejecución Penal N°1, Elizabeth Cabanillas, consideró que no están dadas las condiciones para que Aybar, que purga condena de seis años de prisión por abuso sexual simple agravado por ser el encargado de la guarda, en perjuicio de una adolescente, en el penal de Miraflores, acceda al beneficio.

Es la segunda vez que lo solicita y la segunda vez que le es denegado. La solicitud anterior fue presentada en junio de 2024 y, al igual que ahora, el revés judicial estuvo vinculado al informe de los técnicos del CIF. En esta última resolución, la jueza Cabanillas fue incisiva al «invitar una vez más al solicitante a comprometerse con los tratamientos dispuestos (especialmente el psicológico), a fin de neutralizar o morigerar los aspectos negativos de su personalidad, que aún persisten».

El sometimiento voluntario es un «paso previo a la consideración de cualquier derecho que importe una modificación cualitativa del cumplimiento de la pena», remarcó. En 2024, el abogado defensor de Aybar había solicitado que se le permita continuar cumpliendo la pena con la modalidad de prisión domiciliaria, aduciendo cuestiones de salud. Habiendo cumplido con cuatro de los seis años de condena, su defensor Pedro Vélez pidió un nuevo cómputo de pena y las salidas del penal.

La víctima del abuso por el que fue condenado se constituyó en querellante con el patrocinio del abogado Sebastián Ibáñez para poder tener acceso a las instancias de la ejecución de la pena. Pidió que se efectúe una pericia «psicológica profunda», en coincidencia con la jueza Cabanillas. Las evaluaciones fueron realizadas en varias jornadas, con intervalo de una semana de por medio. El informe fue contundente. Los especialistas le solicitaron que continúe realizando tratamiento psicológico para mejorar su condición mental. Se supo que durante las sesiones Aybar realizó un gran despliegue de seducción emocional, demostrando que necesita proyectar una imagen de poder, de control y con sensación de superioridad desde su rol con respecto a los demás.

Se determinó además que tiene dificultades para colocarse en lugar de otras personas y comprender sus emociones, así como el impacto que generan sus acciones en terceras personas. Teniendo en cuenta que cursa condena por abuso sexual simple agravado por ser el encargado de la guarda en perjuicio de una adolescente, se determinó que no tendría una inhibición de la lívido sexual lo que lo llevaría a efectuar comportamientos arriesgados, engaños y manipulaciones para lograr satisfacer sus deseos.