En abril de 2021, el Gobierno de la Provincia lanzó un nuevo Plan Ganadero que apuntaba a reconvertir la genética del rodeo catamarqueño. Comenzó con la compra de 14 toros reproductores y 1.000 embriones, que se extendió a la inauguración de un Centro de Mejoramiento Genético en agosto de ese mismo año, cuya administración fue cedida a una UTE público-privada constituida en noviembre para funcionar por cuatro años con la posibilidad de prolongar la sociedad en el tiempo. Antes de que ese plazo se cumpliera, el laboratorio fue desmantelado y los productores aseguran que el programa fracasó: las vacas tuvieron una tasa de mortandad de entre el 30 y 50%, por lo que el circuito productivo no se completó.
El proyecto
El puntapié inicial fue un convenio entre el entonces Ministerio de Agricultura y Ganadería, la empresa estatal AICAT, la Sociedad Rural de Catamarca y la empresa privada AGROLEPAL, propietaria de la multipremiada Cabaña La Dominga. La inversión en abril de 2021 fue de $90 millones para la compra de embriones, toros de raza Braford y equipamiento para instalar un laboratorio genético en la Escuela Agrotécnica de Nueva Coneta: el Estado invirtió $70 millones, mientras que la empresa privada aportó el resto. La inauguración del laboratorio fue en agosto de 2021, con la visita del entonces ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Luis Basterra. Allí se puso en práctica el programa para el mejoramiento general de la ganadería bovina para carne y leche de Catamarca, que se realizaría a través de la inseminación artificial y la fertilización in vitro.
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En noviembre de ese año se constituyó la Unión Transitoria de Empresas (UTE) AICAT SE-AgroLepal SRL. Funcionaría por cuatro años «a efectos de desarrollar en forma conjunto el plan integral de desarrollo animal, en las especies Braford y Brangus». Este plazo se determinó así ya que «el programa inmediato a realizar puede ejecutarse en cuatro años y su extensión se justificaría solo en caso de ampliarse el objetivo». La UTE debía trabajar en el desarrollo genético bovino, caprino, ovino y porcino en Catamarca, generando canales de comercialización. AGROLEPAL SRL era la responsable del trabajo de desarrollo genético y obtención del material, mientras que AICAT debía seleccionar los productores donde se aplicaría el programa. El responsable de la UTE fue Alejandro Lauret, titular de La Dominga.
El plan de mejora genética apuntaba, también, a ampliar el abanico de receptores de la tecnología de inseminación y transferencia embrionaria, dotar de infraestructura necesaria a los pequeños productores, acompañado de un plan sanitario y nutricional. Además, se entregaron toros reproductores en Hualfín, La Merced, Las Juntas, Los Altos, Huillapima, Andalgalá, Recreo, Saujil, Los Varela, Tapso y Ancasti. En mayo de 2022, el nuevo ministro de la Nación, Julián Domínguez, visitó el laboratorio del Centro de Mejoramiento Genético y acompañó la presentación Plan Genético Cabra-Oveja-Llama que se llevaría adelante allí. Firmó un convenio con Catamarca por $400 millones destinados al desarrollo genético para incrementar la producción ganadera.
Desarrollo
Entre 2021 y 2022 se hicieron más de 12.000 inseminaciones artificiales y más de 1.100 transferencias embrionarias. Se abarcaron unos cien pequeños y medianos productores y el porcentaje de preñez fue del 55% en las primeras fecundaciones in vitro. Se apuntó a las especies Braford, Brangus y en algunos casos Angus. Según explicó ese año el titular de La Dominga, Alejandro Lauret, se eligió especialmente la raza Braford «porque es una raza sintética, producto del cruzamiento de Hereford con Brahman, que tiene muchísima adaptación en climas diversos, sobre todo en los que el calor y los ectoparásitos dificultan las producciones». Uno de los objetivos del programa era que los productores que habían sido seleccionados para participar pudieran entregar, luego de ciclo, un animal reproductor en pie para repetir el mecanismo con otros productores. Sin embargo, este circuito no se llegó a completar: entre el 30 y 50% de las vacas inseminadas murieron al atravesar partos distócicos, ya que el semen que recibieron pertenecía a razas de mayor porte y las crías eran muy grandes. No lo soportaron.
Antecedente
En 2012, el Gobierno de la Provincia lanzó el «Plan Toro», con el que compró 250 animales de las razas Brangus, Hereford y Braford. El plan no tuvo mucho éxito, pero dejó la histórica frase del ex gobernador Eduardo Brizuela del Moral, quien cuestionó que los animales eran «criados en pesebre, a los que solo les sacaban semen para inseminación y nunca habían visto una vaca». «Los dejaron sueltos y cuando vieron una vaca se murieron. Les daban ataques al corazón», explicó.
Más casos
Una bodega municipal en Fiambalá
En 2021, con un aporte de $70 millones de la minera Zijin-Liex, la intendenta de Fiambalá, Roxana Paulón, inauguró la mostera municipal «La Indómita». Luego la convirtió en bodega y lanzó una producción de vinos que se exportarían a China. En diciembre de 2023 Paulón perdió las elecciones y su sucesor, Raúl Úsqueda, denunció el estado de abandono de la planta. Máquinas destruidas y deudas con el INV. Fue recuperada en enero de 2024 con una inversión de $60 millones de parte de la Provincia.
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El «Plan Tomate»
Entre 2016 y 2017 se realizó el «Plan Tomate», un operativo de producción con el objetivo de alcanzar 1.500.000 de kilos que se habían comprometido a la empresa DULCOR. La firma adelantó $2 millones y, por intermedio de AICAT, se financió a productores de Nueva Coneta. Los colonos denunciaron que la empresa no le reconocía todos los kilos entregados y el Gobierno los responsabilizó por no lograr el objetivo. AICAT debió responder por el incumplimiento.
Agroindustrias Pomán y las aceitunas
En 2018, el Grupo Dulcor decidió cerrar la fábrica de aceitunas Vanoli, ubicada en la Villa de Pomán. El intendente de Pomán, Francisco Gordillo, decidió comprar el predio por $23 millones a pagar en cuotas y lo bautizó como «Agroindustrias Pomán». El grupo empresario compraría la producción. Dos años después, Pomán tomó un crédito con la estatal AICAT por $15 millones para cumplir el pago y lo devolvería con aceitunas. Sigue subsidiada por el Estado.
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