miércoles, 26 marzo, 2025

El Gobierno insiste con los pliegos de la Corte y ratifica la vigencia de García-Mansilla

Noticias Relacionadas

El Senado se reunirá para tratar los pliegos de los jueces de la Corte Suprema y permanece el peligro del rechazo. Sin embargo, en el Gobierno no darán marcha atrás.

El Senado le marcó al Gobierno una cuenta regresiva: el próximo jueves 3 de abril sesionará para tratar los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla, los dos jueces de la Corte Suprema de Justicia que el presidente Javier Milei decidió nombrar por decreto ante la demora del Congreso. Pese al escenario incierto que podría enfrentar en el recinto, el Ejecutivo tiene decidido no recular, según pudo saber MDZ de fuentes oficiales.

«Ya veremos cómo se articula la dinámica del Senado, pero la idea es siempre la misma: que ambos sean votados», le aseguró a este medio un alto funcionario que sigue de cerca la negociación por los lugares del alto tribunal, y agregó: «No vamos a retirar los pliegos».

La aclaración se da en el marco del panorama complejo que enfrenta el oficialismo en la cámara alta. Allí, su notable minoría de tan solo seis bancas le generó dificultades para obtener los dos tercios de los votos de los presentes que exige el artículo 99 de la Constitución Nacional para designar a un juez de la Corte. Fue por ese motivo que, ante unas negociaciones estancadas, Milei decidió nombrar a sus dos candidatos por decreto en comisión para ejercer hasta el 30 de noviembre.

En ese escenario, la oposición encabezada por Unión por la Patria y parte del radicalismo alineado con Martín Lousteau elevaron los dictámenes en la comisión de Acuerdos para tratar ambos pliegos en el recinto, con el objetivo de finalmente rechazarlos. El número mágico para bloquear las designaciones serían 25 votos. De darse esa eventualidad, no es la misma situación para Lijo que García-Mansilla.

Sucede que el juez federal no asumió en el máximo tribunal tras ser designado por decreto, como sí lo hizo García-Mansilla, ya que la Corte Suprema no le autorizó la licencia extraordinaria que le permitiera dejar momentáneamente su oficina en Comodoro Py hasta obtener la ratificación o rechazo del Senado. La negativa de Lijo se debe a que el magistrado no negocia por nada dejar su lugar como juez federal sin tener garantizada su continuidad en la cúpula del Poder Judicial.

Esto lo expresó el propio Lijo a través de un escrito que le envió al magistrado Alejo Ramos Padilla, quien tramita en su juzgado la causa que cuestiona la constitucionalidad de los nombramientos por decreto de Javier Milei. Allí, el aspirante a la Corte aseguró que «no renunciará a su cargo actual de juez federal y su interés se centra en que el Honorable Senado de la Nación le otorgue el acuerdo correspondiente para el cual ya cuenta con dictamen favorable de la Comisión de Acuerdos”.

En ese sentido, si el Senado finalmente no le prestara el acuerdo, su caso quedaría cerrado, al menos hasta el próximo periodo legislativo. Sin embargo, en el Gobierno admiten que si bien «deberían analizar cómo seguir», Manuel García-Mansilla podría quedarse, dado que ya asumió como juez de la Corte y el decreto lo sostiene en su lugar hasta el 30 de noviembre.

Así lo ratificó este martes el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, que en diálogo con Futurock afirmó que «el Gobierno no va a retirar los pliegos”. «Ambos ministros de la Corte fueron designados por decreto en función de las facultades que tiene el Poder Ejecutivo y están en funciones hasta que finalice el periodo de sesiones», explicó el funcionario, y agregó: «En el caso de Lijo, él no ha asumido. Veremos qué hace. Con respecto a García-Mansilla, él puede seguir en su cargo constitucionalmente”.

En la Casa Rosada, un funcionario con llegada directa al presidente coincidió que la situación de ambos jueces corren por vías separadas y desafió al Congreso a «sentarse y votar». Para lograr los dos tercios, el apoyo de la bancada peronista es imprescindible.

En un contexto normal, la negociación con los bloques opositores le correspondería a la vicepresidenta Victoria Villarruel, por su rol como titular del Senado. Sin embargo, debido a que su relación con Javier Milei está completamente rota, esa tarea estuvo desde el inicio en manos del Secretario de Justicia, Sebastián Amerio, a quien señalan como el que realmente mueve los hilos detrás del Ministerio de Justicia que comanda el ministro Mariano Cúneo Libarona.

Si bien un sector del peronismo parecía abierto a la posibilidad de dialogar, las negociaciones se resintieron cuando el Gobierno decidió avanzar con los nombramientos por decreto. Sin embargo, en Balcarce 50 no le temen al escenario del rechazo, ya que confían en que después de las elecciones legislativas un eventual triunfo arrasador de La Libertad Avanza en las urnas les otorgará una nueva composición del Senado donde ambos jueces tendrían su revancha. Como suele decir la tropa libertaria, todo marcha de acuerdo al plan.

Últimas Publicaciones