jueves, 13 de marzo de 2025 01:15
Ayer finalizó la ronda de testimonios en el jury al juez de Belén, Miguel Ángel Aybar. Durante la audiencia se vivió un tenso cruce entre el defensor del magistrado, Alberto Furque, y el fiscal Augusto Barros debido a las constantes interrupciones en la ronda de preguntas.
El tribunal debió intervenir para calmar al letrado quien tildó de “acomodado” al representante del Ministerio Público. En ese clima, los jueces pasaron el debate a un cuarto intermedio para hoy a las 11, cuando se conocerán los alegatos y posiblemente la sentencia.
Las acusaciones giran en torno a un polémico informe de la secretaría de sumarios de la Corte de Justicia, en el que dicen que 455 causas que se tramitaban en el Juzgado de aquel departamento estaban sin resolver.
De parte de la defensa, el magistrado manifestó que al momento de ser elevado el informe, al menos 200 de ellas estaban con resolución, pero que ello no fue informado, ni le dieron la posibilidad de hacerlo debido a que decidieron iniciarle el jury.
El fiscal sustenta las acusaciones en dos sanciones previas en las que Aybar sufrió el recorte de su sueldo, primero del 3% y luego del 11%, aunque la defensa asegura que son sanciones injustas, ya que el magistrado no participó en ninguno de los expedientes, no obstante, fueron tenidos en cuenta para formular la acusación en su contra.
Con los testigos, la defensa intentaba sumar evidencia del trabajo del magistrado, empleados del Poder judicial y abogados litigantes dieron cuenta de esto y compararon con otras jurisdicciones del interior como Tinogasta y Andalgalá, lo que molestó al fiscal Barros, el cual aseguró que: “No se juzga el funcionamiento de las otras jurisdicciones, tampoco el sistema de justicia del interior”.
Con reiteradas objeciones sobre las acotaciones de la defensa, Barros interrumpió el cuestionamiento en varias oportunidades, sin realizar preguntas concretas, sino más acotaciones en contra de la posición de la defensa, lo que llevó al abogado José Alberto Furque, en un tono de voz elevado a responder a los agravios de la fiscalía, a quien mandó a “estudiar” el derecho, entre otras palabras y lo acusó de ocupar un cargo sin estar preparado.
Testigos
Al menos 11 testigos desfilaron por la sala de audiencias, la mayoría mediante video conferencia y uno de ellos, el abogado Quintar, quien debió ser limitado por el presidente del tribunal Hernán Martel, ya que el letrado criticó duramente el funcionamiento de la justicia y más aún la labor de los jueces de la Corte: “Yo sé que lo están enjuiciando por moroso, pero lo más morosos son la Corte de Justicia”, y añadió: “A nosotros nos interesa que sea justicia y no una trampa procesal”. A preguntas de la defensa, el litigante defendió la labor del juez multifueros belicho y manifestó que se trata de un juez trabajador.
Esto último también fue repetido en reiteradas oportunidades por los empleados del Juzgado de la Tercera Circunscripción judicial, quienes en su mayoría coincidieron en que el juez: “Es un magistrado dedicado, eficiente y que acude al juzgado en doble turno e incluso los fines de semana para resolver las causas civiles, comerciales, violencia de género, sumado a que también le toca subrogar el fuero penal y laboral. Estamos desbordados” manifestó una de las secretarias del juez, de apellido Alanís.
“Hoy tenemos tres o cuatro empleados menos, tres de ellos con licencia psiquiátrica, nos hace falta todo, infraestructura, tecnología, no es un edificio, sino una casa y las oficinas, tienen el formato de dormitorios. La Corte de Justicia vino y recién ahora nos pusieron aire acondicionado, se lo agradecemos. En total debemos ser 13 o 14 empleados, muchas veces me llevé trabajo a mi casa, porque vivo a 10 kilómetros del juzgado y en cuanto al sistema LexDoctor, cuando llegué al juzgado era lo más avanzado, pero estamos igual que el banco, si no hay sistema, no podemos hacer nada” lamentó la secretaria.
Finalmente, el tribunal, introdujo la prueba y pasó el debate a un cuarto intermedio para hoy a las 11 para los alegatos.