martes, 21 de enero de 2025 00:37
El despido de 23 operarios de la fábrica MOM Sport, perteneciente al Grupo Shanghai, motivo una serie de reuniones entre empleados, gremio, empresarios y el Gobierno de Catamarca. Esto tuvo como resultado un acuerdo por el cual la empresa se comprometía a realizar la liquidación final de los exempleados; pero este nuevo incumplimiento, más el malestar de los trabajadores por el retraso de los haberes dejó latente la posibilidad de una toma de la fábrica.
Ante la demora en la liquidación final, es que los exempleados se hicieron presentes frente a MOM Sports y allí, ante El Esquiú Play; dieron a conocer la situación de ellos y de sus excompañeros.
Paola, una de las textiles cesanteadas, sostuvo que se encuentran a la espera de su liquidación final dado que hubo un compromiso de pago tras la audiencia con la Dirección de Inspección Laboral de abonarle a los 23 despedidos, pero que solo ocho personas percibieron lo adeudado.
Allí, denunció las irregularidades en los montos abonados, remarcando que “cobraron plata de menos. No pasan los 800 mil pesos cuando te cubre el sueldo y te está debiendo los demás: vacaciones, días de enero, el proporcional del aguinaldo”.
Además, aseguró que los pagos se realizan mediante billeteras virtuales y que aún no cuentan con recibos de sueldo que respalden las transferencias.
“Aquí estamos a la espera de seguir diciéndoles a nuestros hijos que esperen, quizás, hasta el otro viernes, quizás un mes más”, lamentó; para luego recordar que desde el 20 de diciembre no perciben ningún sueldo por lo que la situación la calificó como “insostenible” dado que nadie los respalda, ni la DIL ni el Ministerio de Industria puesto que “nos dejaron en la calle de un día para el otro luego de haber llenado los bolsillos con 130 millones y nadie dijo nada”.
Asimismo, la exempleada dio cuenta de la situación interna entre los empleados y la empresa, adonde precisó que los mismos también están sin cobrar e inclusive mencionó un episodio adonde un gerente “se paró la semana pasada y les dijo que ‘como prioridad estábamos los despedidos para recibir nuestra plata y que al que no le gusta ahí está el portón’ y que el que empiece a hacer paro iba a quedar como nosotros”. “Están bajo amenazas”, enfatizó.
A esto le sumo que sus excompañeros le mandaron mensajes pidiéndole que hablen de la situación en la fábrica, adonde “los tuvieron toda la semana apurándolos con la producción, que tienen que sacar la producción, o sea, vos venís a trabajar pero no sabes cuándo vas a cobrar y los tienen bajo amenaza de que al que no le guste tiene el portón y si iniciaban un paro hoy –por ayer- porque lo estaban planteando iban a quedar igual que a nosotros”.
Por su parte, Ariel, otro de los despedidos, destacó la precariedad de la situación: “Es muy triste lo que está pasando. La verdad que los empresarios que están viniendo volvieron a hacer lo mismo que la anterior empresa y bueno, acá estamos con los compañeros, a ver si el señor se digna en dar la cara, en decirnos ‘acá está la plata y vean lo que hacen’”.
Ante la pregunta sobre posibles medidas de fuerzas, Paola expresó que una de las ideas que le dio un excompañero de trabajo fue que “directamente volvamos a tomar la fábrica entre los que están adentro y los que estamos afuera, porque esto fue una lucha nuestra (…) y la gente de adentro no sabe qué hacer. Está la idea de volverla a tomar a la fábrica”.