El concejal Gerónimo Cabrera (UCR) denunció públicamente la existencia de un foco infeccioso en el departamento Valle Viejo, provocado por camiones municipales que estarían utilizando terrenos para el vertido de desechos contaminantes. La situación, según el edil, pone en peligro la salud de los vecinos y especialmente de los niños que realizan actividades recreativas en el cercano Club Los Hurones, ubicado a solo 300 metros del lugar afectado.
«Estamos hablando de una planta de tratamiento improvisada en pleno corazón de Valle Viejo, con aproximadamente cinco cuadras de desechos que podrían tratarse adecuadamente en una planta especializada», afirmó Cabrera. El concejal compartió un video donde se observa a un camión de la Municipalidad descargando escombros, mientras un hombre que tiene un emprendimiento en inmediaciones de este sector cuestiona al operario, quien justifica su acción alegando que recibe órdenes directas.
La denuncia señala que el foco infeccioso se encuentra entre las calles Julio Herrera y el barrio Los Olivares, en inmediaciones de lo que se conoce como barrio La Antena, en Santa Rosa, y que el vertido indiscriminado de desechos podría ocasionar graves problemas respiratorios a los residentes. «Ésta es otra muestra de la falta de interés del Ejecutivo municipal por el bienestar de la comunidad», denunció Cabrera.
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Desde el Concejo Deliberante, Cabrera aseguró que pedirá citar a la secretaria de Medio Ambiente y al secretario de Obras y Servicios Públicos de la Municipalidad para que den explicaciones sobre esta situación. «No podemos permitir que este tipo de acciones continúen afectando la salud y la calidad de vida de nuestra gente», concluyó.
El Ancasti advirtió del manejo de los residuos en Valle Viejo en reiteradas oportunidades. En agosto pasado, por ejemplo, volvió a denunciarse la situación crítica de los basurales a cielo abierto en Huaycama, por la denuncia de vecinos que cuestionaron tanto a los organismos públicos como a los particulares que arrojan desechos a los costados del camino.
En aquel momento, los vecinos reclamaron que un camión con la inscripción municipal fue visto y grabado arrojando basura a lo largo del camino de acceso a la localidad por la ruta 33, donde se emplaza un viejo basural que viene siendo motivo de quejas desde hace varios años. «Este sitio, además de ser una molestia visual y sanitaria, representa un riesgo significativo para el tránsito aéreo en el aeropuerto Felipe Varela, debido a la atracción de aves carroñeras que ponen en peligro las operaciones de despegue y aterrizaje», advirtieron.
El Ancasti ha documentado la existencia de este basural desde hace muchos años. Aunque en algunas ocasiones, debido a denuncias públicas, se realizaron trabajos de limpieza.