lunes 6 de enero de 2025
Catamarca, ARGENTINA
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Editorial
Durante el fin de semana último, el Gobierno salió a realizar distintos operativos para controlar la implementación del One Shot Plus porque detectó la avivada de algunos comerciantes con el incremento de precios y también con la evasión fiscal. Es desgastante tanto para el Estado como para los usuarios tener que salir a pelear contra la avivada que pone en riesgo la continuidad de una operatoria que ha sido beneficiosa para empleados públicos y privados que tienen cuentas en el Banco Nación.
La operatoria del One Shot Plus es una estrategia conjunta entre el Banco Nación, el Gobierno de la provincia y la Unión Comercial de Catamarca. Los consumidores catamarqueños acceden a descuentos del 50% en comercios adheridos utilizando tarjetas de débito o crédito del BNA. El tope de devolución es de $80 mil.
Desde su primera edición, en el mes de julio pasado, se ha convertido en una herramienta clave de la economía familiar de los catamarqueños y ha motorizado las ventas del sector privado local, que registró durante la última edición en noviembre cerca de $15.000 millones. A nadie se le escapa el gran movimiento que registra el comercio catamarqueño durante la semana de vigencia del beneficio. En julio, la promoción había registrado ventas por 5.300 millones, es decir que el crecimiento fue de un 183% en cinco meses. En octubre, la cantidad de usuarios fue 98.572 y la cantidad de comercios adheridos llegó a 518, último dato disponible.
Para mantener el descuento del 50% es importante saber que el Banco Nación financia un 20%, el Gobierno de la provincia otro 20% y los comerciantes aportan un 10% del beneficio que obtiene cada usuario. En la última operatoria se advirtió que algunos comerciantes subían los precios hasta casi un 10% con el objeto de recuperar esa inversión, pese al incremento que tuvieron de las ventas. Es por eso que resulta agotador para el Estado tener que salir a parar esa travesura y más aún para los beneficiarios tener que recorrer distintos lugares para comparar precios y evitar ser víctimas de la picardía.
Es importante que los actores se comprometan con parámetros éticos para la continuidad de una operatoria que no es gratis, tiene sus costos y su continuidad está dependiendo de un nuevo convenio entre el Gobierno y el Banco Nación, pese a que las autoridades se mostraron optimistas con respecto a su futuro. Además, ARCAT también salió a realizar operativos de fiscalización porque en diciembre notó una baja en la recaudación impositiva el 6,78% según publica el organismo en su página. El dato llamó la atención de los sabuesos porque pese a que fue un año difícil en lo económico, la recaudación venía en ascenso desde agosto. La última baja registrada fue un julio cuando arrojó una caída del 1, 57%, es decir, que el descenso más importante fue en diciembre. Un dato que encendió alarmas.
En definitiva, el Gobierno no solo está preocupado por el incremento de los precios sino también por la disminución en la recaudación impositiva. En ese marco, controla que los comerciantes cumplan con sus obligaciones fiscales y evite argucias que son fáciles de detectar con el cruce de datos con la entidad bancaria.