Tras la denuncia colectiva de varias familias que viven en la localidad El Totoral, ubicada en el departamento Ancasti, por los graves daños ambientales causados por el emprendimiento ganadero de feedlot perteneciente a la familia Tauil, la secretaría de Ambiente en noviembre pasado pidió a la empresa que presente un “plan de remediación”, lo que implica “descontaminar” el lugar.
El plan de mitigación ambiental fue llevado a delante por la empresa familiar. Según comentaron los vecinos a INFORAMA, la descontaminación no es tal. Con máquinas limpiaron el terreno colindante al dique de cola que contiene residuos biológicos del feedlot y acumularon tierra con el fin de elevar las paredes de la presa improvisada para posteriormente abrirlo y que el material contaminante fluya por el terreno.
Producto de las lluvias de finales de diciembre, el material contenido agrandó su volumen y la contención sufrió filtraciones. Finalmente, el personal que trabaja en la remediación abrió el dique, provocando que los residuos contenidos avancen, no solo sobre el terreno que limpiaron, sino que llegó hasta cerca de las viviendas cercanas y afectó, nuevamente, el arroyo del lugar que provee de agua a los vecinos y animales.
«Es un desastre lo que están haciendo, abrieron ese dique y se vino todo el material encima de las casas otra vez, todo va a ir a parar al arroyo, es como si hubiese una creciente, no es que abrieron un poquito para que vaya drenando», explicó con indignación un vecino de la zona.