Las cuatro jugadoras de River acusadas de racismo siguen detenidas en Brasil
El juez Anderson Filho rechazó el hábeas corpus y las cuatro deportistas pasaron la navidad en un penal de San Pablo.
A una semana del partido que disputaron frente a Gremio y que terminó en un escándalo por sus gestos e insultos racistas, cuatro jugadoras de River permanecen detenidas en Brasil, luego de que les fuera rechazado el habeas corpus que presentaron sus abogados para que pudieran recuperar su libertad. Las futbolistas Candela Díaz, Camila Duarte, Juana Cángaro y Milagros Díaz pasaron la navidad en el centro penitenciario de Carandiru, en el norte de San Pablo, sin que los abogados que les brindó el club pudieran conseguir su liberación.
El partido de la Ladies Cup ante Gremio de Porto Alegre de la semana pasada terminó en un escándalo, con seis jugadoras de River expulsadas, y luego cuatro de ellas detenidas por delitos racistas. En las imágenes televisivas se puede ver a Candela Díaz dirigirse a un alcanzapelotas e imitar el gesto de un mono. En tanto, a sus compañeras Duarte, Cángaro y Milagros Díaz las acusadan de dirigirse de manera discriminatoria a la misma persona, al mismo tiempo que Gremio, a través de un comunicado oficia , también denunció insultos a sus jugadoras. Como consecuencia de la situación y la gresca que se generó en el campo de juego, el partido se terminó suspendiendo ya que River sufrió seis expulsiones: las cuatro futbolistas presas, Lara Esponda y Julieta Romero.
Ante la gravedad de la situación, el club se contactó con la abogada paulista Thaís Sankari, quien asumió la defensa de las jugadoras y presentó un hábeas corpus, para que las futbolistas pudieran recuperar la libertad tras pagar una fianza. Sin embargo, el juez Alberto Anderson Filho, del Tribunal de Justicia de San Pablo, rechazó el pedido y no autorizó su liberación antes de Navidad, con lo que Díaz, Duarte, Cángaro y Díaz pasaron las fiestas incomunicadas en el penal paulista.
«Las acusaciones están relacionadas con un delito grave, considerado atroz, cuyas imágenes están circulando ampliamente por la prensa, demostrando claramente la conducta de la acusada Candela Díaz», dice parte del fallo emitido por Anderson Filho, que compromete principalmente a Candela Díaz. «Existen testigos que confirman la conducta delictiva perpetrada por ella, la cual al parecer no solo ofendió a la víctima Kayque, sino también a Stephanie, quien ciertamente no le hizo gestos mostrando sus genitales».
La resolución del juez está ajustada al código penal brasileño, que condena con dureza este tipo de comportamientos a partir de una ley promulgada en 2022 que equipara la injuria racial con el racismo, un delito que no permite la fianza y tampoco prescribe. De acuerdo a la gravedad de la ofensa, un imputado puede recibir una pena de entre dos a cinco años de prisión, que puede llegar a ser duplicada si se considera que se cometió por dos o más personas de manera conjunta. Se trata de una figura que se suele aplicar en los partidos fútbol como en otros eventos deportivos, culturales y religiosos.
La defensa de las jugadoras argumenta que lo sucedido tuvo que ver con una reacción a una agresión anterior por parte del alcanzapelotas presentado como víctima. La intención es conseguir la liberación lo antes posible para que luego el proceso continue de acuerdo a las leyes brasileñas. Por el hecho, River recibió una sanción de dos años sin poder participar de la Ladies Cup.